Comenzamos desde el principio:
¿ Que es la copa menstrual?
El articulo esta hecho de material hipoalergénico, que se introduce en la vagina para retenerla menstruación de manera natural. La copa menstrual tiene numerosos beneficios, aunque también algunas desventajas a tener en cuenta, sobre todo las primeras veces que se utiliza.
Primeras cuestiones que resolver, es que la copa menstrual no influye en el estilo de vida de las mujeres, no altera sus actividades ni cotidianas ni deportivas, tampoco tiene influencia ninguna sobre la planificación familiar. En general destacas que no altera el microbiota vaginal.
¿ Que copa escoger y el material de que esta hecha ?
La copa menstrual es un recipiente fabricado con silicona médica que se coloca en el interior de las paredes vaginales. A medida que cae el flujo menstrual, se queda dentro de una forma completamente natural hasta que retiramos la copa.
A diferencia de los tampones tradicionales, no absorbe la menstruación, tan solo se encarga de recogerla y por ello reduce el riesgo de bacterias. Por ello es imprescindible tener en cuenta de que material está fabricada y usar solo las que son de silicona médica, ya que este material pasa por los controles para evitar que tenga componentes nocivos.
Este tipo de silicona, que se usa habitualmente en entornos clínicos, es no tóxica e inodora. Además, su superficie carece de poros, de forma que no pueden crecer bacterias en su interior, y es resistente a la degradación y la deformación.
Este cambio lo notara tu bolsillo y el medio ambiente
Los artículos de higiene femenina son de uso constante y necesitamos de su reposición constantemente, mientras que la copa menstrual con unos cuidados adecuado puede durarte hasta 10 años… Sin realizar cuentas muy sofisticadas es una buena inversión tanto para tu salud como para tu bolsillo.
Debemos tener en cuenta también que utilizando la copa reducimos la generación de desechos, contribuyendo así a cuidar el planeta. Para conservarla de manera adecuada e higiénica, solo es necesario limpiarlas con agua entre cada uso y, una vez acabe la regla, sumergirlas en agua hirviendo durante unos minutos para esterilizarla.
¿Frecuencia con la que se debe cambiar la copa?
Al igual que lo métodos tradicionales, el cambio de la copa depende de la cantidad de flujo y la capacidad de la copa. En general puedes realizar su uso hasta 12 horas y la mejor noticia es que puedes dormir con ella.
En el mercado existen diferentes tamaños y se debe escoger el que mejor se adapte a nuestro cuerpo. Habitualmente, los modelos más grandes están indicados para las mujeres que han tenido partos vaginales.
A pesar de estos beneficios, para algunas mujeres el uso de la copa menstrual puede resultar incómodo o conllevar algunas desventajas. Estas son las principales:
- Al principio puede resultar difícil de colocar
Con el tiempo, la colocación de la copa menstrual es sencilla, pero las primeras veces puede que no consigamos ponerla correctamente. En el momento de insertarla, lo mejor es presionarla con los dedos para que coja forma de tampón e introducirla suavemente. Una vez dentro, volverá a su forma y se quedará fija contra las paredes vaginales.
- Puede provocar fugas si no es el modelo adecuado
Cuando colocamos la copa menstrual, sus bordes se quedan sellados contra las paredes de la vagina para que el flujo no salga. Pero a veces se producen fugas y las razones más habituales son que la copa está mal colocada o que no es del tamaño adecuado.
- Vaciarla a veces resulta engorroso
Una vez la copa está llena, se retira y vacía el flujo en el inodoro. Después, debe limpiarse con agua y secarla antes de introducirla de nuevo. Dado que es probable que nos manchemos se precisa jabón, algo que no siempre tenemos a mano. La parte positiva es que no es necesario cambiarla a menudo, así que podemos hacerlo cuando estemos en casa o en un baño que resulte cómodo.
La copa menstrual es una opción totalmente higiénica que no debería causar ninguna molestia una vez colocada. Si resulta incómoda o existen dudas respecto a su uso, lo mejor es consultar con el ginecólogo.