En las cosas del comer los españoles lo tenemos claro. Donde esté un producto made in Spain lo de fuera tiene poco que hacer en nuestras mesas :solo uno de cada cuatro consumidores piensa que los productos de fuera son de mejor calidad que los locales. Así lo demuestra un estudio elaborado por la consultora Nielsen, en el que se establece una comparativa sobre las preferencias de los españoles en cuanto a marcas locales y marcas globales a la hora de llenar la cesta de la compra.
Del estudio se concluye que siete de cada diez encuestados prefieren comer carne, fruta y verdura de procedencia española. Pero esta preferencia no solo atañe a estos productos: en otras categorías de la cesta de la compra como pescados y mariscos, leche y conservas vegetales «seis de cada diez prefieren el origen local a que el producto venga de fuera». El origen es un factor que marca la diferencia y que los consumidores tienen muy presente. Aunque para muchos consumidores el factor precio a la horade comprar es decisivo, desvincularse de la parte emocional del origen es muy complicado. Según el estudio «parala mitad de los españoles el origen de los productos es tan importante como su coste». Es más, «para uno de cada cinco es incluso más decisivo cuando hace la compra». Así se demuestra el peso del origen de las marcas en la mente de los consumidores, un aspecto que deben tener en cuenta a la hora de internacionalizarse.
¿Cuáles son las razones de la relevancia del made in Spain? Está extendida la idea entre los consumidores de que contribuyen a la riqueza nacional y de las empresas locales. Otro aspecto destacable es la calidad delos productos donde el reconocimiento también se produce a nivel internacional: en un reciente estudio elaborado por Vente-Privee y el Foro de las Marcas Renombradas Españolas se dice que «el 83% delos europeos considera que las marcas españolas de alimentación son de buena calidad».
Sin embargo, y volviendo al estudio de Nielsen, las marcas globales son para un 40%de los consumidores «más innovadoras y con mayor capacidad para presentar nuevos productos». Y esto se ve a la hora de comprar productos menos relacionados con la alimentación como, por ejemplo, las bebidas, los cosméticos o los alimentos para mascotas.
Del informe se extraen varias conclusiones y enseñanzas tanto para las marcas locales como para las internacionales. En un mundo globalizado donde Internetha puesto al alcance de todos las marcas y productos procedentes de diferentes países, es clave para la empresa local ser capaz de innovar y dar respuesta alas exigencias de los clientes, además de saber adaptarse a las necesidades y peculiaridades de cada mercado sin perder su esencia. Las marcas del sector alimentario, apoyadas en el éxito internacional de la gastronomía española, tienen que aprovechar este momento de oro para dar un paso más y convertirse en marcas «locales»: empresas con una gran presencia internacional pero con mucho «sabor» español para conseguir que la cesta de la compra -también la de nuestros vecinos- sea cada vez más made in Spain.
Texto original de puromarketing